Un día envié este texto a un amiga:
“¿Como debe acabar esta civilización que exagera la potencia intelectual y la potencia industrial en detrimento de la vida del alma?
¿No acrecentará desmesuradamente su capacidad de sufrimiento?
¿No será pues el gigante que escala el cielo?
¿Y muere aplastado?”
Pregunte a la amiga cuando creía que se había escrito este texto y quien lo había escrito. Me contesto si era Raimon Panikkar hace poco tiempo.
Le conteste: -No. Fue el romántico alemán Jean-Paul hace dos siglos.
El mensaje –trágico- del romántico alemán continua plenamente vigente al cabo de dos siglos. Si entonces el romántico ya veía las sombras de la tecnocracia moderna –utilizando las palabras de Raimon Panikkar- ¿Dónde hemos llegado después de dos siglos?